Este es uno de mis postres preferidos, sencillo, con ingredientes que siempre tenemos en casa y muy versátil. Hoy he preparado la receta base, pero se puede variar con todo tipo de rellenos, crema pastelera, chocolate derretido, nata montada, mousse, lo que os apetezca; esto en la versión dulce, pero si eliminamos el azúcar se puede utilizar un relleno salado y disfrutar de unos creps deliciosos.
Es un postre que se como en carnavales y con lo poquito que queda os dejo la receta por si os apetece probarla.
INGREDIENTES:
3 huevos
1 vaso de leche
1 y 1/3 de vaso de agua
1 chorrito de coñac
3 pizcas de sal
1/2 cucharadita de levadura Royal
200 gr. de harina
Mantequilla
Azúcar para espolvorear
PREPARACIÓN:
Se mezclan todos los ingredientes y se bate con la batidora hasta conseguir una masa muy fina. Se deja reposar una media hora.
Ponemos una sartén al fuego (en mi cocina la puse al 7 de 9) cuando esté caliente se añade un trocín de mantequilla, cuando se derrita se le echa aproximadamente 34 de una garcilla de la masa. La vertemos en un lado de la sartén, la inclinamos para que se reparta bien por toda la base, debe quedar muy fina. Cuando esté dorada, le damos la vuelta y la dejamos dorar por el otro lado.
Os dejo estas fotos para que veáis lo que os quiero explicar.
El frixuelo debe quedar muy fino.
Y los bordes muy crujientes.
La foto de abajo está hecha al trasluz, para que se vea lo delgadito que queda. Para mí esto es muy importante, porque si no queda como una tortilla francesa.
En un plato echamos una cucharada de azúcar, ponemos el frixuelo caliente encima y otra capa de azúcar, y vamos colocando sucesivamente los frixuelos, siempre espolvoreamos con azúcar entre uno y otro. Con el calor que desprende el azúcar se derrite y nos queda bañado en almíbar
