08 noviembre, 2015

PIZZA DE CALABACÍN Y CHERRY

Creo que la pizza es de esas recetas que triunfan siempre. Solo hay que elegir los ingredientes que más nos gusten para acertar de pleno. En este caso calabacín y tomates cherrys, así conseguimos una pizza vegetal, ligera y con un sabor suave y riquísimo.

Espero que os guste. 



INGREDIENTES: (para 4 pizzas grandes)

600 gr. de harina de trigo
50 gr. de harina integral
375 ml. de agua
1 cubito de levadura
80 ml de aceite de oliva
Sal
Calabacín
Tomates cherry
Unas cucharadas de salsa de tomate
Queso mozarella

PREPARACIÓN:

Lo primero que haremos será preparar la masa

En un bol amplio echamos las dos harinas y la sal y mezclamos bien. Después añadimos el aceite, el agua  y la levadura desmenuzada. Amasamos dentro del bol con la mano. Una vez que estén todos los ingredientes bien integrados enharinamos ligeramente la meseta de trabajo y empezamos a amasar. Vamos a intentar no añadir mucha harina más, así que un amasado, un minuto de reposo, otro amasado, otro minuto de reposo y así hasta conseguir una masa fina.



Untamos un bol amplio con aceite y metemos dentro la masa y la tapamos. y dejamos reposar hasta que esté bien subida (una orientación es que debe doblar su volumen), aproximadamente unos 90 minutos. 

Mientras sube preparamos el calabacín y los tomates. Lo lavamos todo bien. Cortamos los tomates cherry en dos. Ponemos en una sartén un poco de aceite de oliva.  Cuando esté caliente vamos echando los tomates y los hacemos, primero con la parte de dentro hacia abajo. Después les damos la vuelta, salamos y dejamos que se hagan un poco más.

Repetimos lo mismo con el calabacín. Lo cortamos en rodajas finas, echamos un poco de aceite en la sartén, cuando esté caliente vamos colocando las rodajas de calabacín, los hacemos un poco por un lado, les damos la vuelta, salamos y dejamos otros minutos más. 

Esto es para que en el horno las verduras no suelten agua sobre la masa de pizza.

Troceamos el queso mozarella y reservamos.

Pasado el tiempo de reposo encendemos el horno a 200º en posición arriba y abajo. Y empezamos a darle forma. Enharinamos ligeramente la meseta, volcamos la masa, la dividimos en porciones, más o menos iguales, hacemos bolas, las dejamos reposar unos 5 minutos tapadas. Cogemos una porción y la estiramos con el rodillo hasta conseguir que nos quede delgada y bien redondita. 

Untamos la masa con salsa de tomate, colocamos los tomates y las rodajas de calabacín y el queso mozarella.


Cuando el horno esté caliente metemos la pizza y la cocemos aproximadamente unos 20-25 minutos, hasta que tenga buen color. 

La sacamos, la colocamos sobre una rejilla y servimos caliente.





01 noviembre, 2015

HUESOS DE SANTO

Hoy os traigo un dulce típico de estos días, los huesos de santo. En el blog tengo publicados otros huesinos que nada tienen que ver con estos, pero que también son apropiados para estas fechas, así como los buñuelos 

Yo utilicé para hacer el mazapán esta receta pero vale cualquier otra que os guste.

La forma y el truco para hacerlos se lo copié a Lola. Desde aquí, gracias por compartir con todos tu buenhacer en la cocina. 


INGREDIENTES:

Para el mazapán:
450 gr. de almendra molida
245 gr. de azúcar glass (se puede utilizar el azúcar normal)
70 ml. de agua

Para la crema de yema:
5 yemas
35 ml. de agua
120 gr. de azúcar
1 cucharadita rasa de maizena

Para el escarche:
Una taza de azúcar glass
Unas cucharaditas de agua

REPARACIÓN:

Primero preparamos el mazapán. En un cazo echamos el agua y el azúcar, lo dejamos que caliente y cuando veamos que el azúcar está disuelto apagamos el fuego, añadimos la almendra y removemos con una cuchara de madera con fuerza para que se intregre todo, hasta conseguir una masa bastante consistente. (Yo suelo tener siempre más almendra de la indicada en los ingredientes y si en este punto que meda una masa ligera añado más almendra)

Cubrimos una fuente con papel film (yo utilicé una alargada) y vertemos el mazapán, lo extendemos un poco con una cuchara de madera o lengua y tapamos de nuevo con film. Lo dejamos reposar toda la noche a temperatura ambiente.

Al día siguiente preparamos la crema de yema. En un cazo echamos el azúcar y el agua y preparamos un almíbar flojo, sin revolver dejaremos que hierva unos 8 minutos a fuego suave. Lo apartamos del fuego para que enfríe un poco. Mientras enfría echamos en un cuenco las yemas y la maizena, lo mezclamos y lo  vamos añadiendo al almíbar sin dejar de revolver con las varillas. Lo ponemos de nuevo al fuego, hasta que espese. La volcamos en un cuenco y tapamos con papel film. Reservamos.


Ya solo nos queda hacer la forma de los huesos. Para ello utilicé un palo de brocheta y una aguja de tejer del nº 6 (también se puede usar un lápiz, un palito de madera para cocina o lo que tengáis a mano).

Siempre que tengamos que trabajar con el mazapán podemos espolvorear la meseta con azúcar glass, resulta muy cómodo.

Cogemos un trozo de mazapán, hacemos un rulo y lo extendemos hasta conseguir un grosor de unos 3 mm., no más, y un ancho de unos 3.5 mm. (al hacer el dibujo va a ensanchar más) y un largo más corto que el tamaño del palo de la brocheta. Hacemos con este palo la incisiones, presionando bastante.


Ahora le damos la vuelta, enrollamos sobre la aguja y cortamos, presionamos un poco la zona de unión y retiramos de la aguja con cuidado.


Los hacemos todos y dejamos secar unas horas. 


Pasado este tiempo, metemos la crema de yema en una manga pastelera y rellenamos los huesos.


Preparamos el escarche. Echamos el azúcar glass, vamos añadiendo agua hasta conseguir una mezcla más bien gordita y que nos cueste un poco manejar. Pincelamos los huesos de santo y dejamos secar sobre una rejilla.

El resultado:



25 octubre, 2015

ROSCA DE PAN CON HARINA DE ESCANDA

Este es el pan que preparé para acompañar un pote de berzas. El toque de sabor que le da la harina de escanda resultó perfecto, sabores de pueblo, auténticos y que combinan a la perfección.

Le he puesto poca cantidad de harina de escanda pero si queréis un pan con más sabor, solo hay que añadir más cantidad y ajustar el agua. 

Espero que os guste.


INGREDIENTES:

500 gr. de harina de trigo
150 gr. de harina de escanda
500 ml. de agua
Un buen chorro de aceite de oliva
Un cubito de levadura
Sal

PREPARACIÓN:

En un bol grande echamos las dos harinas (dejamos un poco de la de trigo para amasar), añadimos la sal, el aceite de oliva y parte del agua, mezclamos bien. Desmenuzamos la levadura y seguimos añadiendo agua. Enharinamos ligeramente la meseta, volcamos la masa y amasamos hasta que nos quede fina.

Untamos con aceite un bol grande y metemos dentro la masa, la tapamos y dejamos reposar hasta que suba, tiene que doblar el volumen, unos 90 minutos más o menos (yo la dejo toda la noche en la nevera y al día siguiente la dejo a temperatura ambiente una hora antes de darle forma al pan).

Cuando tenemos la masa subida, enharinamos de nuevo la meseta, volcamos la masa, desgasificamos y le damos forma; cogemos una porción (con la cantidad de ingredientes de arriba nos dará para al menos dos roscas) y hacemos una bola grande, metemos los dedos en el medio y empezamos a estirarlo y girarlo hasta conseguir la forma y tamaño que queramos. El agujero central tiene que ser bastante grande, porque al volver a levar se hará más pequeño y en el horno un poco más todavía. Colocamos la rosca en la bandeja del horno que habremos cubierto con papel vegetal. Otra opción es, una vez que tengamos la rosca, colocarla en un molde de bizcocho con forma de rosca. Tapamos y dejamos subir unos 20-30 minutos. 

Mientras sube encendemos el horno a 220º en posición arriba y abajo. Cuando esté caliente metemos la bandeja y lo cocemos unos 30 minutos, hasta que coja buen color. Comprobamos que está cocido, para ello podemos pincharlo con un palillo o bien podemos darle la vuelta y si al golpearlo con los nudillos suena a hueco ya lo tenemos en su punto.

Lo dejamos enfriar sobre una rejilla.




Y ya que encendemos el horno vamos a aprovecharlo y hornear pan para varios días. Lo congelamos envuelto en papel film y a disfrutar de pan casero.


18 octubre, 2015

CHORIZOS A LA SIDRA

Hoy vengo con una receta muy asturiana. Unos chorizos a la sidra que son un aperitivo de lo más apetecible, y de lo más sencillo. 

Yo los acompañé con una rebanada pequeña de pan y unas patatas fritas, pero solos y con un rico pan casero son perfectos.


INGREDIENTES:

Chorizos asturianos
Sidra asturiana

PREPARACIÓN:

Pinchamos los chorizos con un palillo en varios puntos. En una pota echamos un poco de aceite de oliva, cuando esté caliente añadimos los chorizos y los doramos un poco por todos los lados. Después vertemos la sidra hasta cubrirlos (en este punto tendremos mucho cuidado porque salpica y mucho), subimos el fuego hasta que rompan a hervir y después lo bajamos para cocerlos despacio unos 35 minutos aproximadamente.

Así de sencillo.





11 octubre, 2015

TARTA DE MANZANA CON SALSA TOFFEE

Después del descanso estival toca volver al trabajo y a retomar el blog. Y como no podía ser de otro forma con una receta dulce, dulce. Es un poco laboriosa pero sin mucha complicación. El resultado merece la pena porque es de esos postres que te piden repetir.  Mi consejo es que dejéis la tarta reposar de un día para otro, gana mucho en sabor. 

Espero que os guste.


INGREDIENTES:

Para la base:

18-20 galletas tipo Digestive
3 cucharadas de leche condensada
2 cucharadas de leche
2 cucharadas de mantequilla

Para el relleno:

250 gr. de queso mascarpone
300 gr. de queso tipo philadelfia
2 huevos enteros y 3 yemas
4 cucharadas de maizena
200 gr. de nata
120 gr. de leche condensada

Para la cobertura de manzana:

4 manzanas grandes
2 cucharadas de azúcar
1 tajada de mantequilla

Para la salsa toffee:

150 gr. de azúcar
200 gr. de nata

PREPARACIÓN:

Lo primero que haremos será preparar la cobertura. Pelamos y picamos las manzanas. En un cazo echamos la mantequilla, la tostamos ligeramente y añadimos las manzanas troceadas y el azúcar, la dejamos cocer aproximadamente unos 20-25 minutos a fuego lento, hasta que quede blanda. Reservamos. Cuando enfríe la escurrimos sobre un colador grande para que suelte el líquido.

Ahora preparamos la base. Trituramos las galletas (yo utilizo para molerlas el rodillo de madera sobre una tabla), vamos echándolo en un bol, después añadimos la leche condensada, la leche y la mantequilla derretida, lo mezclamos bien y terminamos integrándolo todo con la manos.

Cubrimos la base de un molde desmontable con papel vegetal, vamos colocando la mezcla de galletas sobre el papel. Para extenderla mejor, una vez que tengamos cubierta toda la base, nos ayudamos con el rodillo de madera. Colocamos el cierre del molde, cerramos y untamos las paredes del molde con mantequilla y pegamos papel vegetal, cubrimos también con la masa de galleta el lateral del molde más o menos unos 4 cm. de altura. Reservamos.

Ahora preparamos el relleno. En un bol amplio echamos los dos quesos, la nata, la leche condensada y la maizena tamizada, lo mezclamos todo bien con las varillas manuales. Después añadimos un huevo entero y batimos, después el otro huevo y seguimos batiendo y por último las tres yemas de una en una hasta que quede una crema fina. 

Vertemos esta mezcla sobre la base y la metemos en el horno (que previamente habremos calentado a 170º). Dejamos cocer aproximadamente unos 45 minutos.

Sacamos la tarta y repartimos por encima la cobertura de manzana. Y dejamos cocer otros 25 minutos más o menos hasta que esté cuajada (pinchamos con un tester o un palillo y si sale seco ya está). La dejamos en el horno otros 20 minutos más. 

Sacamos y dejamos enfriar. Cuando esté fría la desmontamos y colocamos sobre una base para tartas.

Ya solo nos queda preparar la salsa toffee. 

Ponemos en un cazo la nata y la calentamos. En otro cazo echamos el azúcar y hacemos un caramelo más bien oscuro; cuando esté listo lo apartamos del fuego y de la cocina, volcamos la nata;  en este punto hay que tener mucho cuidado para no quemarse, así que no lo tocamos hasta que deje de hervir y llevamos de nuevo al fuego. Cocemos la salsa unos 8-10 minutos hasta que quede como unas natillas finas (al enfriar espesa mucho). La dejamos enfriar a temperatura ambiente. Si nos queda demasiado espesa cuando la vayamos a utilizar la podemos calentar ligeramente en el micro.

A la hora de servir vertemos la salsa toffee sobre cada porción de tarta.





30 agosto, 2015

CERRADO POR VACACIONES

Llega septiembre y es hora de tomar un descanso. Así que el blog permanecerá cerrado durante este mes. Es tiempo de playa y tumbona, sol y relax. 

Hoy no hay receta pero sí el agradecimiento, como siempre, a todos los que me visitan, seguidores incondicionales que me acompañan desde el principio y a todos los que se van sumando día a día a mi blog. 

Gracias por seguir conmigo. Espero veros a todos a la vuelta y seguir disfrutando de vuestra compañía.

Nos vemos en octubre.


23 agosto, 2015

FRÉJOLES CON SALSA DE TOMATE

Esta es una de esas recetas que preparo con mucha frecuencia pero hasta hoy no me he dado cuenta que no la tenía en el blog, así que por fin le toca ver la luz. Es sencilla, sana, cómoda de hacer y aunque es un plato caliente siempre resulta apetecible. Como todas las recetas tradicionales que podáis encontrar en el blog las preparo como lo hace mi madre, y aunque ella siempre añade el huevo cocido he querido darle un toque diferente con el falso huevo escalfado.

Si tenéis salsa de tomate casera en conserva la receta se simplifica aún más, nos ahorramos el tiempo de prepararla y tenemos el plato listo casi sin darnos cuenta.


INGREDIENTES (para 4 personas):

Un kilo de fréjoles
8 lonchas de jamón serrano (también se puede usar en tacos)
4 huevos

Para la salsa de tomate:

½ cebolla
Un diente de ajo
3 tomates grandes maduros
¼ pimiento rojo pequeño
Sal
Una pizca de azúcar

PREPARACIÓN:

Preparamos los fréjoles recortando todos los bordes para quitarles el hilo y los troceamos al gusto (si por dentro tienen fabas con la punta de un cuchillo se las quitamos).

Las dejamos un poco a remojo con agua y las aclaramos varias veces.

Vamos a preparar la salsa.

Pelamos el ajo. Troceamos la cebolla. Lavamos y picamos el trozo de pimiento. Lavamos los tomates y los troceamos. Reservamos.

En una olla echamos aceite de oliva, solo que cubra el fondo. Cuando esté caliente echamos el ajo, cuando dore añadimos la cebolla y el pimiento. Lo dejamos pochar hasta que la cebolla coja buen color. Por último incorporamos el tomate y lo rehogamos bien. Echamos un poco de sal. Dejamos cocer la salsa aproximadamente uno 45 minutos y le añadimos una puntita de azúcar. La pasamos por el pasapuré y reservamos. (Este paso lo podemos saltar si tenemos una buena salsa de tomate en conserva).

Ahora cocemos las fréjoles. En una olla ponemos agua con sal, cuando hierva echamos las fréjoles y las dejamos cocer. Yo lo hice en la olla rápida y con 3-4 minutos de cocción en posición 1 y el fuego a 6 fue suficiente. Si las cocemos en una olla tradicional lo haremos durante unos 10-15 minutos a fuego moderado, controlando para que no queden demasiado blandas, deben quedar duritas porque después las vamos a cocer con la salsa. Las sacamos del agua y la escurrimos.

Mientras cuecen los fréjoles echamos en una pota un poco de aceite, cuando esté caliente añadimos el jamón troceado y rehogamos un minuto, volcamos la salsa de tomate, dejamos cocer unos 5 minutos más y por último incorporamos los fréjoles. Lo dejamos cocer a fuego muy suave unos 40-45 minutos hasta que los fréjoles estén tiernos.

A la hora de comer preparamos los huevos. Para acompañar este plato en casa siempre cocíamos los huevos, pero en este caso los he preparado con un falso escalfado.

En un cazo ponemos agua a hervir.

Cortamos un trozo de film, lo untamos con aceite de oliva, lo metemos dentro de una taza o un bol, fijándolo bien al fondo y las paredes. Cascamos el huevo y lo echamos dentro, levantamos el papel film, le damos unas vueltas ajustándolo bien al huevo y lo atamos con hilo de cocina o hacemos un nudo. Cuando el agua esté hirviendo echamos el huevo y lo dejamos cocer unos 4-5 minutos. Con mucho cuidado lo sacamos, lo desatamos, separamos los bordes del papel film y con ayuda de una espumadera colocamos el huevo sobre el plato.




16 agosto, 2015

BIZCOCHO DE NATA Y NUECES

La nata de la leche siempre se ha utilizado en repostería, para galletas, bizcochos, rosquillas..., era un ingrediente indispensable. Pero conseguir esa nata ahora es casi imposible, así que vamos a recurrir a la nata comercial, que si bien no es lo mismo, podemos conseguir un sabor bastante similar.

Este es uno de esas recetas que me gustan a mí, vamos a utilizar la medida del bote de la nata para el resto de los ingredientes. ¿Ventajas? Pues que no necesitamos recurrir al recetario, ni al peso o vaso medidor para hacer este bizcocho. Echamos la nata en una taza y esa misma medida será la que utilizaremos para el azúcar y la harina. 

Espero que os guste.


INGREDIENTES:

200 ml. de nata para montar (medida en una taza)
3 huevos grandes
1  medida de azúcar (la misma medida de la nata)
2 medidas de harina (dos medidas de la nata)
1 sobre de Royal
1/2 cucharadita de azúcar avainillado
3 pizcas de sal
15 nueces

PREPARACIÓN:

Encendemos en horno en posición arriba y abajo a 150º C. 

Lo primero que haremos será preparar todos los ingredientes. Vertemos la nata en una taza. Echaremos en otra taza igual la misma cantidad de azúcar. Después medimos la harina, ahora serán dos medidas iguales a la de nata, la tamizamos y reservamos. Troceamos las nueces mondadas, las echamos en un cuenco, espolvoreamos con un poco de harina, mezclamos con los dedos y reservamos.

En un bol amplio echamos los huevos y el azúcar y batimos con las varillas eléctricas hasta que queden bien espumosos (unos 4-5 minutos en posición media). Después añadimos la nata y seguimos batiendo ya en posición mínima. Por último echamos la sal, el Royal y vamos añadiendo la harina en varias tandas. Batimos bien hasta conseguir una mezcla fina. Añadimos las nueces y mezclamos con una espátula.

Vertemos la mezcla en el molde (que previamente habremos untado con mantequilla y espolvoreado con un poco de harina) y cocemos unos 40-50 minutos aproximadamente. Comprobamos que esté cocido pinchando con un palillo o un tester y si sale seco ya lo tenemos listo. Lo sacamos y lo colocamos sobre una rejilla. Cuando entibie un poco lo desmoldamos y lo dejamos enfriar totalmente sobre la rejilla.




09 agosto, 2015

SARDINAS AL HORNO

Me encanta el pescado azul; la única pega es el olor que deja al prepararlo. La mejor  manera para evitar esto es hacerlo al horno pero también es verdad que conseguir que queden con buen color como si las sardinas estuvieses asadas o fritas no siempre resulta fácil.

Así que vamos a preparar el horno en posición grill y una temperatura alta, así conseguimos que doren en poco tiempo y no queden demasiado hechas.

Como acompañamiento unas patatas cocidas con un sofrito de ajo y pimentón, como las hace mi madre, riquísimas.


INGREDIENTES:

Sardinas de buen tamaño
Patatas
Ajo
Pimentón dulce (también se puede añadir un poco de pimentón picante, al gusto)
Aceite
Sal

PREPARACIÓN:

Lavamos las sardinas, les quitamos las cabezas, secamos bien y adobamos con sal y ajo. Reservamos.

Ahora preparamos las patatas. Las pelamos y lavamos. Ponemos agua en una pota. Cuando hierva echamos un poco de sal y las patatas, las dejamos cocer. Las sacamos del agua y reservamos.

Mientras cuecen la patatas encendemos el horno a 200-210º en posición solo grill. Cuando esté caliente, untamos un molde apto para horno con aceite de oliva, colocamos encima las sardinas y las rociamos con un poco de aceite (a  mí me gusta utilizar para esto el aceite que viene con pulverizador, resulta perfecto)

Colocamos la bandeja en una posición muy alta para que doren bien, las dejamos unos 8 minutos, sacamos la bandeja del horno, damos la vuelta a las sardinas para que doren por el otro lado y las dejamos hacer unos 8-10 minutos más.

Mientras se hacen las sardinas terminamos de preparar las patatas. En una sartén echamos un buen chorro de aceite, cuando esté caliente echamos unos 4 dientes de ajo fileteados, una vez dorados apagamos el fuego y echamos media cucharadita de pimentón dulce. Lo vertemos todo sobre las patatas y rehogamos bien a fuego muy suave.

Servimos las sardinas acompañadas de las patatas.



02 agosto, 2015

COMTESSA

La entrada de hoy viene con una novedad y es que ahora podéis seguirme a través de facebook. Allí compartiré mis recetas y alguna cosita más que no va a tener nada que ver con la cocina pero que espero que también os guste. Para acceder al face he puesto el icono en la columna derecha.

Y ahora vamos a lo que toca.

Esta tarta la vi en el blog de María "Una pincelada en la cocina". Os dejo los enlaces para que podáis visitar su cocina. Un recetario impresionante del que podéis sacar un montón de recetas como ésta. 

¿A quién no le apetece un helado con este calor? Y si va acompañado de un crujiente chocolate se convierte en irresistible. Así que esta tarta es perfecta para terminar una comida veraniega.

Desde aquí tengo que agradecer a María que haya compartido con todos esta receta. 


INGREDIENTES:

500 ml. de nata 35% materia grasa
3 claras
140 gr. de chocolate para postres Nestlé
110 gr. de azúcar (60 gr. para las claras y 50 gr. para la nata)

Para decorar:

80 gr. de chocolate para postres Nestlé
Un puñado de avellanas tostadas

PREPARACIÓN:

Vamos a seguir el orden que nos indica María:

Primero forramos el molde. Colocamos unas tiras de papel vegetal a lo largo y dos a lo ancho que sobresalga bien por el molde y encima colocamos el film transparente, intentando que se fije bien a las paredes.

Derretimos al baño María los 140 gr. de chocolate. Para ello lo troceamos y lo colocamos en un cazo y éste dentro de una pota con un poco de agua, mejor si el agua no hierve y el cazo no toca el agua. Mientras se funde preparamos dos láminas de papel vegetal. Cuando tengamos el chocolate derretido lo vamos vertiendo encima del papel con una cuchara pequeña y lo vamos extendiendo con una espátula hasta conseguir una capa muy fina de chocolate del tamaño aproximado del molde (en cada lámina de papel nos cabe tres tiras de chocolate). Cubrimos cada lámina con otra más de papel vegetal, colocamos una encima de la otra y lo metemos todo en la nevera para que endurezca bien.

El resultado debe ser así:


Mientras tanto montamos la nata con los 50 gr. de azúcar. Yo lo hago siempre con las varillas manuales, hasta conseguir el punto que veis en la foto.


Echamos en un bol amplio las claras y el azúcar y las montamos con las varillas eléctricas en posición máxima hasta conseguir que queden bien duras, como en la foto.


Ahora mezclamos las natas y las claras con las varillas manuales y con movimientos envolventes para que no bajen.

Ya solo queda montar la tarta. Sacamos el chocolate de la nevera. Vamos vertiendo en el molde unas cucharadas de la mezcla de nata y claras, extendiéndolo bien para que nos quede uniforme y colocamos encima una lámina de chocolate presionando un poco. Volvemos a echar otras cucharadas de la mezcla y otra lámina de chocolate, así hasta acabar los ingredientes, la última capa será de la mezcla.

La tarta la hice en un día de mucho calor y el chocolate se derretía con solo mirarlo. Así que cada vez que utilizaba cada porción de chocolate metía el resto en la nevera para que volviera a endurecer un poco.

Cubrimos la tarta con papel vegetal y envolvemos el molde con papel film. Lo metemos en el congelador. Yo lo dejé toda la noche.

Antes de servirlo decoramos la tarta. La sacamos del congelador esperamos unos minutos y la desmoldamos ayudándonos de las tiras de papel vegetal. Derretimos el chocolate en el micro o al baño María. Cuando esté fundido lo metemos en un biberón o en una manga pastelera y decoramos la tarta. Inmediatamente echamos las almendras troceadas. Metemos la tarta en la nevera hasta la hora de servir.

Si no se va a consumir entera o queréis dejarla para otro día una vez decorada la metemos de nuevo bien tapada en el congelador.




26 julio, 2015

PAN DE CERVEZA

Sé que encender el horno con este bochorno no resulta nada tentador. Pero si queremos disfrutar de un pan casero con un sabor realmente rico no nos queda otra que soportar el calor.

Utilicé una lata de cerveza y con esa cantidad fue suficiente para amasarlo, pero si tuviésemos que añadir más líquido a la masa podemos echar un poco de agua. En este punto hay que tener en cuenta que no todas las harinas absorben igual los líquidos.


INGREDIENTES:

300 gr. de harina de fuerza
300 gr. de harina integral de espelta
Una lata de cerveza
Un buen chorro de aceite de oliva
Un cubito de levadura
Una pizca de sal
Copos de avena 

PREPARACIÓN:

En un bol grande echamos las dos harinas (reservamos un poco de la de fuerza para después amasar) la sal y revolvemos. Añadimos la levadura desmenuzada, un buen chorro de aceite de oliva y vertemos la cerveza. Amasamos directamente con la mano para que se integren bien todos los ingredientes y volcamos sobre la meseta enharinada. Amasamos un poco ayundándonos con la harina que hemos reservado hasta conseguir que la masa nos quede fina. La metemos en un bol grande que previamente habremos untado con aceite. Tapamos el bol y dejamos reposar hasta que leve, aproximadamente unos 90 minutos. 

Pasado ese tiempo sacamos la masa del bol, la volcamos sobre la meseta enharinada, desgasificamos ligeramente y le damos forma al pan. Colocamos el pan sobre la bandeja del horno (cubierta con papel vegetal) y dejamos que suba de nuevo, unos 20-30 minutos más. 

Mientras sube de nuevo la masa encendemos el horno a 210º en posición arriba y abajo. 

Transcurrido el tiempo de reposo y una vez que el horno esté caliente pincelamos el pan con agua y lo cubrimos con los copos de avena. Metemos la bandeja en el horno y cocemos el pan durante unos 25 minutos aproximadamente. Comprobamos que esté cocido, pinchándolo con un palillo o un tester y dándole unos toques con los nudillos por la base del pan, si suena hueco está cocido. 

Lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla. 

Y ya tenemos nuestro pan listo.