14 mayo, 2017

ROSCAS GLASEADAS

En  casa nos encanta la bollería, da igual qué tipo de masa sea, siempre triunfa. La verdad es que nada mejor que disfrutar de un desayuno o una merienda con dulces caseros, así que hoy toca unas roscas ricas con un ligero baño glaseado, para endulzarnos el día.

Espero que os guste.


INGREDIENTES:

Para la 1ª masa:

3 cucharadas de agua
3 cucharadas de harina
5 gr. de levadura

Para la 2ª masa:

350 gr. de harina aproximadamente
55 gr. de azúcar
60 ml. de agua
7.5 gr. de levadura
2 huevos
3 cucharadas de aceite de oliva suave
75 gr. de mantequilla

Para el glaseado:

Una taza de azúcar glass y unas cucharadas de agua (3-4 cucharadas)

PREPARACIÓN:

Hacemos la primera masa. Para ello echamos en un bol pequeño todos los ingredientes y mezclamos hasta hacer una bola.

En otro cuenco echamos agua tibia, lo justo para que no esté fría, y metemos la bola dentro. Dejamos reposar hasta que la bola flote.

Mientras tanto preparamos la 2ª masa.

Mezclamos el agua y la levadura. En un bol echamos la harina, añadimos la mezcla anterior (agua y levadura), los huevos y la 1ª masa (tiene que estar ya flotando en el agua, si no esperamos un poco más), mezclamos todo bien y dejamos reposar unos 5 minutos tapado. Después añadimos el aceite y volcamos la masa sobre la meseta, amasamos y después añadimos la mantequilla, volvemos a amasar hasta que se integre bien, nos va a costar un poco, pero dejaremos reposos de 1 minuto, amasamos otro poco y así hasta que la masa esté suave y manejable. Dejamos reposar 15 minutos más o menos.

Enharinamos ligeramente la meseta de trabajo y empezamos a hacer las roscas. Dividimos la masa en ocho porciones iguales (más o menos), con ayuda del rodillo hacemos tiras de unos 4 cm. de ancho y el largo que nos dé. Enroscamos sobre sí mismas (dándole forma de espiral como si fuese un tornillo) y juntamos los extremos, las vamos colocando sobre papel vegetal (habremos cortado 8 trozos, uno para cada rosca, así a la hora de colocarlos sobre la bandeja del horno nos resultará más cómodo) y dejamos reposar unas 3-4 horas, hasta que estén bien subidas.

Encendemos el horno en posición arriba y abajo a 220º y las horneamos unos 8 minutos, no más.

Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Cuando estén frías, preparamos el glaseado. Echamos en una taza o cuenco el azúcar y vamos añadiendo a cucharadas el agua hasta conseguir la textura que deseemos, en este caso tiene que ser más bien ligera que podamos untar fácilmente y pincelamos con esta mezcla las roscas. Dejamos que endurezca y listas.