28 junio, 2015

ENSALADA DE PERA Y QUESO AZUL

Con el calor nuestras mesas se llenan de platos ligeros, frescos y sencillos y las ensaladas se hacen indispensables. Además las ensaladas nos permite echar en el plato todo lo que nos apetezca, combinar sabores y texturas diferentes sobre una base de lechugas consiguiendo así un resultado fabuloso. 


INGREDIENTES:

Lechuga variada
Pera conferencia
Langostinos
Queso azul
Sal

Para la vinagreta:

Aceite de oliva
Vinagre de jerez
Pistachos
Sal

PREPARACIÓN:

Lavamos bien las lechugas y la escurrimos. La troceamos a gusto.

Lavamos los langostinos, les quitamos la cabeza y pelamos. Los salteamos ligeramente y troceamos (las cabezas y las cáscaras las podemos utilizar para preparar un caldo).

Lavamos, pelamos y troceamos las peras, las rociamos con un poco de limón. Reservamos

Preparamos la vinagreta. Pelamos los pistachos, los molemos toscamente, los echamos en un bol y añadimos el aceite de oliva, unas gotas de vinagre y una pizca de sal.

Emplatamos: echamos la lechuga, salamos ligeramente, añadimos las peras troceadas, los langostinos, el queso azul desmenuzado y rociamos con un buen chorro de vinagreta.




21 junio, 2015

TARTA DE MANZANA CLÁSICA

La tarta de hoy es un clásico que podéis ver en los escaparates de cualquier pastelería, sin mucha complicación y con el auténtico sabor de las tartas caseras, que al llevar mucha fruta no resulta demasiado dulce ni demasiado pesada. 

En casa siempre triunfa, así que espero que a vosotros también os guste. 


INGREDIENTES:

1 lámina de hojaldre
4 manzanas

Para la crema pastelera:

750 ml. de leche
7 cucharadas colmadas de maizena
4 yemas de huevo
125 gr. de azúcar
Canela
Limón

Para la cobertura:
2 cucharadas de mermelada de melocotón
3 cucharadas de agua
4 hojas de gelatina

PREPARACIÓN:

Lo primero será preparar la crema pastelera.

De los 750 ml de leche separamos una taza, en ella echamos las yemas y la maizena y con las varillas manuales removemos bien. Ponemos a hervir el resto de la leche con la canela, la piel del limón y el azúcar.

Cuando la leche haya hervido unos 5 minutos, la apartamos del fuego, retiramos la canela y la piel de limón, vertemos en ella poco a poco el contenido de la taza y removemos bien con las varillas.

Lo ponemos de nuevo al fuego, tenemos que revolver la mezcla continuamente para que no se nos haga grumos y cuando espese y haya cocido unos 3-4 minutos la apartamos. La echamos en un plato o fuente y lo tapamos con papel film, de forma que toque la crema para que no nos quede costra. Reservamos.

Mientras tanto encendemos el horno a 190º en posición arriba y abajo. Enharinamos la meseta de trabajo y extendemos ligeramente el hojaldre. Cubrimos el molde que vayamos a utilizar con papel vegetal y colocamos encima el hojaldre. Lo pinchamos con un tenedor en varios puntos y metemos al horno aproximadamente uno 10 minutos. Sacamos el horno y dejamos entibiar un poco.

Pelamos las manzanas y las picamos. Rociamos con un poco de limón para que no se oxiden. Ahora echamos por encima del hojaldre la crema pastelera, la extendemos bien para que nos quede igual por toda la base. Y vamos colocando encima la manzana muy apretada para que al cocer no se nos abra y además para que tenga buen sabor a manzana. Espolvoreamos con azúcar y metemos al horno aproximadamente una hora y cuarto hasta que coja buen color y el hojaldre se haya hecho totalmente. La sacamos del horno y cuando podamos desmoldarla la colocamos encima de una rejilla hasta que enfríe totalmente. 

Ahora nos toca preparar la cobertura. Ponemos la gelatina a hidratar con agua. Mientras tanto ponemos al fuego la mermelada y el agua. Escurrimos la gelatina y la añadimos a la mermelada hasta que se haya disuelto totalmente. La dejamos entibiar un poco y cubrimos con esta mezcla la tarta. Dejamos enfriar para que cuaje.

A la hora de servir espolvoreamos el plato con un poco de canela.




14 junio, 2015

CREMA DE CALABACÍN CON ACEITE DE LANGOSTINOS

Como por el norte aún no nos sofoca el calor todavía podemos disfrutar de platos de cuchara ligeros como esta crema de calabacín.

Es una receta más que conocida, lo único que he hecho ha sido darle un toque diferente con el aceite de langostinos. Es sencilla de preparar y nos resuelve un primer plato sano y bien rico.

Espero que os guste.


INGREDIENTES:

4 calabacines
1/2 puerro
1 patata pequeña
2 quesitos tipo "el caserío"
5-6 langostinos (los cuerpos)
Sal
Aceite de oliva

Para el aceite de langostinos:
1/2 vaso de aceite de oliva
5-6 cabezas de langostinos
1 diente de ajo

PREPARACIÓN:

Lavamos los langostinos, los pelamos y reservamos por un lado los cuerpos y por otro las cabezas.

Empezamos por preparar el aceite de langostinos. En un cazo echamos el aceite, las cabezas de los langostinos y el diente de ajo pelado y entero. Lo ponemos al fuego muy suave, sin que hierva, vamos a confitarlo y lo haremos durante unos 40 minutos, mientras se va haciendo vamos aplastando las cabezas para que suelten todo el sabor. Pasado ese tiempo, apartamos del fuego dejamos templar y colamos. Reservamos.

Mientras se va haciendo el aceite preparamos la crema. Lavamos el puerro y lo troceamos. Pelamos la patata y picamos. Por último lavamos los calabacines, los pelamos y troceamos. 

En la olla rápida ponemos un poco de aceite, cuando esté caliente añadimos el puerro picado y dejamos que se hago un poco, unos 5 minutos, sin que coja color, después incorporamos la patata y seguimos rehogando otros 5 minutos más y por último añadimos el calabacín. Seguimos rehogando otros 6-8 minutos y vertemos agua caliente hasta cubrir. Cerramos la olla, cuando suba la válvula cocemos unos 15-20 minutos al 1 y el fuego al 6 (podemos cocerlo en una olla tradicional pero en este caso alargaremos la cocción más tiempo).

Una vez que podamos abrir la olla, lo sacamos al vaso de la batidora añadimos los quesitos y trituramos hasta conseguir una crema fina. Ponemos de nuevo al fuego y dejamos cocer unos 5 mínutos más. Si es necesario rectificamos de sal.

A la hora de servir, salteamos los langostinos con un poco de aceite, salamos y troceamos. Echamos la crema en el plato, colocamos unos trozos de langostinos y regamos con el aceite de langostinos.




07 junio, 2015

CROQUETAS DE BACALAO

Hoy os traigo un aperitivo infalible, una croquetas de bacalao, aunque sea de lo que sean las croquetas siempre gustan a todos. Ya pueden ser de jamón, de queso, de gambas, de setas.., son un bocado que triunfa siempre. 


INGREDIENTES:

2 cucharadas grandes de mantequilla (aunque yo en este caso utilicé manteca)
1 cucharada de aceite de oliva
4-5 cucharadas colmadas de harina
500-600 ml de leche aproximadamente
400 gr. de migas de bacalao
Un diente de ajo
Sal

Para rebozar:

Huevos
Pan rallado

PREPARACIÓN:

El día anterior ponemos las migas de bacalao a desalar y le cambiamos el agua varias veces. Al día siguiente lo volvemos a aclarar bien y secamos con un paño de cocina. Troceamos y reservamos.

En una sartén echamos un poquito de aceite de oliva. Cuando esté caliente añadimos el ajo picado muy menudo. Cuando empiece a coger color añadimos el bacalao troceado y lo dejamos hacer unos 2 minutos, no más. Reservamos.

En un cazo amplio echamos el aceite y la mantequilla, dejamos que la mantequilla se vaya fundiendo. Cuando empiece a hervir echamos la harina, y la rehogamos bien durante unos minutos. Si vemos que necesitamos más harina  añadimos un poco más hasta conseguir un resultado de migas. Ahora empezamos a incorporar la leche poco a poco, echamos un chorro, revolvemos bien y no añadimos más leche hasta que se haya absorbido, y así hasta conseguir la textura que nos guste y siempre sin dejar de revolver para que no se nos haga grumos. Añadimos el bacalao y todo el jugo que ha soltado al sofreír. Revolvemos bien y dejamos cocer unos 8-10 minutos más, a fuego suave y siempre sin dejar de revolver. Si es necesario rectificamos de sal.

Volcamos toda la masa sobre una fuente o plato y dejamos enfriar (si es posible de un día para otro)

Con la ayuda de una cucharilla cogemos porciones y vamos dando la forma de bola o bien rectangular, como os guste. Rebozamos con pan rallado, huevo y pan rallado. Una vez preparadas ponemos una sartén con abundante aceite de oliva al fuego, cuando haya cogido temperatura freímos las croquetas en varias tandas. El fuego debe estar más bien fuerte así se dorarán bien por fuera y por dentro nos quedarán suavecitas. Las vamos colocando en un plato cubierto con papel absorbente para que suelten el aceite y ya podemos servirlas.