16 noviembre, 2011

ROSCA DE PAN

Este fin de semana no compré pan con toda la intención de hacerlo casero, así que el sábado ya me puse manos a la obra para hacer el formiento. Y el domingo a primera hora con la masa, es increíble que con unos ingredientes tan básicos se consiga un resultado tan bueno. Yo animo a todo el que no lo haya hecho nunca, que lo intente. Yo llevo poco tiempo amasando pan, pero tengo que reconocer que a medida que vas probando nuevas harinas, distintas masas madres, las formas de presentarlo, cada vez es más sencillo y los resultados van mejorando. Hoy toca una rosca de pan, ideal tanto para acompañar las comidas como para tostadas.



INGREDIENTES:

Para la masa madre:

150 gr. de harina de fuerza
170 gr. de agua tibia.
1/2 cubito de levadura de panadero

Para la masa de pan.

La masa madre.
250 gr. de harina de fuerza. Si necesitamos más la vamos añadiendo a medida que amasamos.
50 gr. de harina de espelta.
1/2 cubito de levadura prensada.
150 gr. de agua.
Media cucharadita de sal. 

PREPARACIÓN:

Lo primero que hacemos es la masa madre o formiento.

Mezclamos en un bol todos los ingredientes (harina, agua y levadura) y con una cuchara de madera removemos bien hasta que consigamos deshacer los grumos de la harina.

Lo dejamos reposar toda la noche tapado con un paño.

Al día siguiente añadimos a la masa madre las dos harinas, la sal y el agua tibia donde habremos disuelto la levadura, lo mezclamos todo bien.

Sobre la meseta enharinada depositamos la masa y amasamos hasta que quede muy fina. Si vemos que necesitamos más harina la vamos añadiendo poco a poco, tiene que quedar con cuerpo pero no dura.

La dejamos reposar en un bol tapada con un paño hasta que doble su volumen, aproximadamente unas dos horas, más o menos, esto  dependerá del calor del ambiente

Cuando vemos que ha subido bastante, lo volcamos sobre la meseta enharinada y la volvemos a amasar para quitar el aire, lo mejor es golpearlo fuerte y amasarlo un poco con los nudillos.

Cubrimos la bandeja del horno con papel vegetal.

Para formar la rosca metemos los dedos en el medio de la masa y empezamos a estirarlo hasta conseguir la forma que queramos, el agujero central tiene que ser bastante grande, porque al volver a levar la masa se hará más pequeño, y en el horno un poco más todavía.

Colocamos la rosca sobre la bandeja del horno, la volvemos a tapar y la dejamos subir hasta que doble su volumen, aproximadamente otra hora más.

Cuando veamos que le queda poco para subir encendemos el horno a 200º en posición ventilador o 240º en posición arriba y abajo. Es muy importante que el horno esté caliente para que el pan suba y no quede duro.

Antes de meterlo en el horno, le damos unos cortes con un cuchillo bien afilado. Se puede espolvorear con un poco de harina, yo utilicé la harina de espelta.

Lo dejamos cocer una media hora aproximadamente, para comprobar que está cocido lo golpeamos con los nudillos y tiene que sonar hueco, también podéis pincharlo por un lateral con un palillo, si sale limpio está, si no lo dejamos unos 5 minutos más.

Al sacarlo lo dejamos enfriar sobre una rejilla.

Espero que os guste.





Una vez frío se puede congelar, se saca por la mañana y a la hora de la comida está estupendo.