26 mayo, 2013

BRAZO GITANO CLÁSICO

Este es el brazo gitano clásico, de crema pastelera y de yema, adornado como siempre lo he visto en las confiterías. No presenta mucha dificultad, pero sí es un poco laborioso, así que os aconsejo un poco de organización para que no nos veamos agobiadas. Se puede preparar, yo lo hice así, el bizcocho y la crema pastelera un día, se deja enrollado y al día siguiente hacemos la crema de yema y lo adornamos, de esta manera dividimos el trabajo en dos días.

Espero que la explicación no sea demasiado engorrosa, pero ya sabéis que si tenéis alguna duda podéis comentármelo. 

Con esta entrada me despido hasta julio, me tomo unas semanas de vacaciones en el trabajo y también en el blog. Espero que disfrutéis de este mes de julio y a la vuelta nos vemos.


INGREDIENTES:

Para el bizcocho:

4 huevos.
125 gr. de harina.
125 gr. de azúcar glass.
2-3 cucharadas de leche
Mantequilla.

Para la crema pastelera:

2 yemas de huevo.
400 ml.de leche
85 gr. de azúcar
6 cucharadas rasas de harina fina de maíz (maizena)
1 cucharada de flanín
Piel de limón y  canela molida.

Para el almíbar:

Una taza de agua.
3 cucharadas de azúcar.
Un chorro de vino dulce.

Para la crema de yema

8 yemas
150 ml. de agua
150 grs de azúcar
2 cucharaditas de maicena

Para adornar:

200 ml. de nata para montar
2 cucharadas de azúcar
Unas cerezas en almíbar

PREPARACIÓN:

Para la crema pastelera:

En media taza de leche fría echamos la maizena y el flanín, añadimos las yemas y mezclamos bien. Ponemos el resto de la leche con el azúcar, la piel del limón y la canela, cuando hierva retiramos del fuego y añadimos la mezcla anterior poco a poco y sin parar de revolver. Lo ponemos otra vez al fuego y  lo llevamos  a ebullición, sin dejar de remover. Cuando  espese, unos 4 minutos, retiramos del fuego, lo cubrimos con papel film (que toque la crema para que no nos quede costra). Reservamos.

Para el bizcocho:

Separar las claras de las yemas.

Batir las claras a punto de nieve fuerte (con las varillas eléctricas a máxima potencia) y reservar.

Trabajamos las yemas con el azúcar hasta que estén cremosos (con las varillas eléctricas a potencia baja, en posición 1). Añadimos la harina tamizada en varias tandas y la mezclamos bien. Si vemos que al ir incorporando la harina nos queda demasiado espeso y que nos cuesta trabajarlo intercalamos alguna cucharada de leche, pero sin excedernos. Por último incorporamos las claras con movimientos envolventes para que no nos baje (esto lo hacemos con las varillas manuales).

Forramos la placa del horno con papel vegetal y lo untamos con un poco de mantequilla. Vertemos la preparación del bizcocho y lo dejamos cocer a horno medio, 180º, durante unos 15 minutos. Tiene que quedar un poco dorado y firme al tacto.

Cuando lo sacamos del horno, aún caliente, lo envolvemos sobre el mismo papel vegetal para darle la forma de brazo gitano y lo dejamos enfriar así envuelto.

Mientras preparamos el almíbar. Para ello ponemos el agua, el azúcar y el vino dulce a cocer durante unos 20 minutos. Reservamos.

Cuando tengamos todo frío desenvolvemos el bizcocho, lo pinchamos con un tenedor (para que coja bien el almíbar) y lo pincelamos con el almíbar, si nos gusta más mojadito echaremos más y si nos gusta más seco menos, al gusto. Repartimos crema pastelera por encima del bizcocho y lo enrollamos de nuevo. Lo envolvemos con papel film o con el mismo papel vegetal presionándolo para que nos quede prieto. Lo dejamos refrigerar en la nevera, yo lo dejé de un día para otro. Cubrimos con blondas de papel la fuente en la que vayamos a colocar el brazo, y encima unas tiras de papel albal, encima el brazo y así al cubrirlo con la crema de yema si nos cae algo, que cae, no se nos manche la blonda, cuando se termine de adornar quitamos el papel albal y la blonda quedará limpia).

Ahora preparamos la crema de yema.

Echamos en un cazo el agua y el azúcar y lo dejamos cocer hasta conseguir un punto de hebra fuerte. En un bol echamos las yemas y las batimos un poco.

Cuando tengamos el almíbar lo apartamos, lo dejamos que enfríe unos 3-4 minutos  y lo vamos añadiendo poco a poco a las yemas. Cocemos la crema al baño María hasta que espese.

La apartamos, la volcamos sobre un plato y la tapamos con papel film, lo dejamos enfriar por completo.

Sacamos el brazo gitano y cubrimos bien con la crema de yema. Espolvoreamos con azúcar y con un soplete lo caramelizados (hay que tener un poco de cuidado porque con el calor la crema se puede derretir un poco). Mientras enfría preparamos la nata.

En un bol echamos la nata y con las varillas manuales empezamos a batir, cuando esté semimontada añadimos el azúcar y seguimos batiendo hasta que veamos que está bastante dura. La tapamos con papel film y la dejamos en la nevera para que coja cuerpo (se puede meter unos minutos en el congelador).

Cuando la tengamos la metemos en la manga pastelera y adornamos el brazo gitano.

Para terminar colocamos una cerezas en almíbar y listo.

Espero que os haya gustado.





19 mayo, 2013

PANECILLOS CON PEPITAS DE CHOCOLATE

Son perfectos para una merienda infantil, os aseguro que no dejarán ni uno. Porque son suaves, con un toque  dulce y con un ingrediente que siempre triunfa, el chocolate, vamos que lo tienen todo para que se coman la merienda sin protestar.

Con las cantidades que os indico salen unos 12 bollitos así que unos los hice así y otros con un poco de azúcar.



INGREDIENTES: (para 12-14 bollitos)

500 gr. de harina de fuerza, aproximadamente
50 ml. de leche
75 ml. de agua
50 gr. de mantequilla
50 gr. de azúcar
1 cubito de levadura
Una pizca de sal
1 huevo
Un puñado de pepitas de chocolate
Para pincelar: una yema y una cucharadita de leche

PREPARACIÓN:

La noche anterior congelaremos las pepitas de chocolate.

En un bol echamos el agua y la leche (debe estar todo tibio). Disolvemos en ella la levadura, lo tapamos y lo dejamos reposar 15 minutos.

Derretimos la mantequilla, la dejamos entibiar.

En un bol grande echamos el huevo entero, la mantequilla, el azúcar, el agua y la leche con la levadura y mezclamos bien. Añadimos casi la totalidad de la harina (dejamos un poco para amasar) y la sal y con una cuchara de madera lo revolvemos bien. Cuando hayamos conseguido una masa más o menos manejable, la volcamos sobre la meseta enharinada y amasamos durante unos 10 minutos ayudándonos del resto de la harina. Añadiremos solo la harina que necesitemos, es conveniente que la masa nos quede muy blanda.

Hacemos una bola y la colocamos en un bol grande (que habremos untado con mantequilla) y la dejamos reposar aproximadamente una hora y cuarto, tapado con un paño.

Cuando haya subido la volcamos de nuevo sobre la meseta enharinada, la desgasificamos amasándola un poco. Cortamos la masa en unas 12 ó 14 porciones. Con las manos las extendemos un poco y echamos las pepitas de chocolate congeladas, hacemos unas bolitas y las vamos colocando sobre la bandeja del horno que habremos cubierto con papel vegetal. Las dejamos reposar unos 40 minutos, tapados con un paño (el tiempo dependerá del calor del ambiente).

Mientras suben encendemos el horno a 200º en posición arriba y abajo.

Cuando estén subidos los pincelamos (en un bol mezclamos la yema con le leche) y vamos colocando las pepitas de chocolate congeladas, clavándolas un poco.

Los horneamos durante  unos 12-14 minutos.




Algunos los hice tipo bollo suizo con azúcar humedecida.



12 mayo, 2013

TARTALETAS DE SETAS

Las tartaletas siempre es una propuesta muy socorrida. La masa es muy sencilla de hacer y el relleno dependerá de lo que tengamos en la nevera porque admite de todo, verduras, carnes, pescados,  así que se pueden adaptar a los gustos de cada uno. Os gustarán.


INGREDIENTES (para 6 tartaletas y un larguero)

Para la masa:

10 cucharadas rasas de maizena
250 gr. de harina todo uso
150 gr. de mantequilla
2 huevos

Para el relleno:

400 gr. de setas
8 lonchas de jamón serrano
4 huevos
75 gr. de queso cremoso
100 ml. de nata para cocina
2 cucharadas de queso rallado (4 quesos) y un poco más para gratinar

PREPARACIÓN:

Lo primero será hacer la masa para la base

En un bol mezclamos la maicena, la harina, la sal y la mantequilla (que tendremos a temperatura ambiente durante 2 horas), lo mezclamos con los dedos hasta conseguir una especie de migas. Después añadimos la huevos un poco batidos y mezclamos bien. La envolvemos con film y la metemos en la nevera durante una hora mínimo (se puede preparar el día anterior para adelantar trabajo).

Mientras preparamos el relleno. Limpiamos con un paño húmedo las setas por las dos caras, las troceamos muy menuditas y las ponemos a pasar en una sartén durante unos 5-7 minutos. Las ponemos a escurrir y reservamos.

Picamos también muy menudito el jamón. En una sartén echamos una cucharadita pequeña de aceite y  lo sofreímos ligeramente. Reservamos.

En el vaso de la batidora echamos los huevos, la nata, el queso cremoso, el queso rallado (dejamos un poco para gratinar) y batimos hasta que se integren bien todos los ingredientes.

Encendemos el horno a 190º.

Y ahora vamos a preparar las tartaletas.

Sacamos de la nevera la masa, enharinamos ligeramente la meseta de trabajo y con ayuda de un rodillo la extendemos bien. Colocamos el molde de las tartaletas boca abajo encima de la masa, cortamos aproximadamente un centímetro por fuera del molde, damos la vuelta al mode y ajustamos bien la masa al  molde y la pinchamos por varios puntos con un tenedor.

Una vez los tengamos todos los metemos en el horno unos 8 minutos. Los sacamos y repartimos por encima la setas, después el jamón y después  la mezcla de la batidora a cucharadas hasta cubrir las tartaletas. Colocamos un poco de queso rallado encima y cocemos unos 25 minutos, aproximadamente.

Las sacamos, las dejamos enfriar unos 5 minutos sobre la rejilla y servimos calientes.




05 mayo, 2013

ENSAIMADAS

¿Qué mejor que empezar el día con un buen desayunos? Estas ensaimadas son perfectas, suaves, ligeras y en su punto dulce, riquísimas.

Cuando las vi en el blog de Sara, no dudé un momento en guardar la receta, para mí era un lujo poder hacerlas en casa. A ella le quedaron geniales, porque además de ser de la tierra tiene unas manos de oro, pero sinceramente a mí me daba mucho respeto ponerme con esta masa, pero desde luego viendo el resultado no serán las últimas, y la próxima vez rellenas de crema, que son las favoritas en casa. 

Así que aquí os dejo la receta original.


INGREDIENTES:

Para la masa de arranque:
5 ml. de agua
5 gr. de levadura fresca de panadería
10 gr. de harina aproximadamente, utilizaremos lo justo para que no se nos pegue a las manos.

Resto de la masa:

340 gr. de harina de fuerza aproximadamente
55 gr. de azúcar
55 ml de agua
7.5 gr. de levadura fresca de panadería
2 huevos medianos
15 ml. de aceite de oliva
Manteca de cerdo

PREPARACIÓN:
Primero haremos la masa de arranque. En un bol mezclamos el agua con la levadura hasta que ésta se disuelva. Iremos añadiendo la harina para formar una bola. En un bol echamos agua (no debe estar muy fría), metemos la bola de masa y esperamos a que flote.

Mientras tanto vamos a preparar la otra masa. Mezclamos el agua con la levadura y removemos bien para que se disuelva. En un bol echamos la harina, la mezcla anterior, el azúcar y los huevos, lo amasamos con las manos dentro del mismo bol. Cuando esté todo bien mezclado añadimos la masa de arranque y seguimos amasando. Después iremos echando en varias tandas el aceite y seguimos amasando.

Lo dejamos reposar unos 15 minutos.

Y empezamos a darles forma. Para ello untaremos generosamente la meseta con aceite de oliva, y cuando digo generosa, es que tiene que quedar bien embardurnada. Cogemos porciones pequeñas (a mí me salieron 8 ensaimadas de un tamaño mediano) y con un rodillo las estiramos muy finitas, como os enseño en la foto.



Lo untamos bien con manteca de cerdo y enrollamos como si fuese un canutillo.


Las enrollamos en forma de caracola.



Las vamos colocando en la bandeja del horno que habremos cubierto con papel vegetal. Las dejamos levar hasta que doblen su volumen, dependerá de la temperatura de ambiente pero no menos de dos horas. Sara dice que en invierno se pueden dejar toda la noche y hornearlas al día siguiente.
Cuando veamos que casi están subidas encendemos el horno a 180º. Una vez caliente las salpicamos con agua muy fría. La metemos en el horno y las dejaremos cocer unos 10-12 minutos hasta que cojan un color doradito.

Las sacamos para una rejilla y pasados 5 minutos las espolvoreamos con abundante azúcar glass. Las dejamos enfriar por completo y listas.